La Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Castellón adquirió el 30 de diciembre de 1976 la Casa Abadía de la parroquia-concatedral de Santa María de Castelló al Obispado de Segorbe-Castellón, procediendo en dicho año a los trabajos de su restauración y consolidación. Se ubica en el casco histórico artístico de Castelló, al lado del Fadrí, flanqueando uno de los accesos a la Plaza Mayor a través de la Plaza de la Hierba.
Su nombre se debe al hecho de haber sido residencia del vicario que el abad de la Cartuja de Vall de Crist tenía en Castelló. Esto era debido a la bula de 8 de mayo de 1397 del papa Benedicto XIII por la cual se incorporaba la rectoría Parroquial de Castelló, con todas sus rentas, a dicha Cartuja. Esta situación se mantuvo hasta que, con la supresión de las órdenes religiosas en 1835, Castelló pudo tener cura propio y constituyó un arciprestazgo, convirtiéndose entonces en residencia del Párroco Arcipreste y en oficinas parroquiales.